domingo, 31 de diciembre de 2006

Fin de año

Y llegamos a fin de año. El 2006 comenzó con la ilusión de volver a publicar Camulus como lo hicimos entre 1998 y 2001, y terminó con la desilusión de no haberlo hecho. De todas maneras pudimos hacer conocer el material pues lo publicamos en www.comiconline.com.ar que es un sitio que armamos exclusivamente para poner material para que lean gratis.
Voy a aprovechar para hacer unos agradecimientos y reconocimientos personales. Primero a mi Esposa e hija que se bancan mi delirio inerminable de hacer historietas. A mi co-equiper y amigo Pablo García, con el cual nos embarcamos en esta aventura hace casi 10 años (Si!!!! en el 2007 EFX Studio cumple 10 años!!!). Tuvimos idas y vueltas, pero Camulus se empeña en mantenernos unidos (Como extraño las reuniones de los sabados). A los amigos de
La Productora, especialmente (a no ponerse celosos los otros maricones) a Jok que sigue confiando en mí como colorista (siempre está a tiempo de arrepentirse) y con el cual también compartimos este proyecto que es Camulus. A toda la gente que conocí mediante esta maravilla que es el blog (Fernando Sosa, Juan José Flores, F!X, Niamh, El Chispa, Wally Gomez, Aperion, María Inés, Gabriel Nante y otros que andan por ahí).
Para terminar les dejo un ailustrción que hizo un nuevo colaborador: Guillermo Lizarzuay

Gracias a todos y gracias a Dios (por supuesto que cuando hablo de Dios hablo de Camulus)



2 comentarios:

Anónimo dijo...

Es verdad, la bestia de Camulus se puso al hombro diez años de nuestras vidas. Ya no hay mates con facturas los días sábados, pero quedan los mails, el chat y las ganas. Hicimos lo que queríamos, publicar historietas. Lo logramos pero la crisis nos dejó en la banquina, y ahora que internet nos da la posibilidad, seguimos en la nuestra.
Los agradecimientos nunca sobran. Hubo gente que se fumó este hermoso delirio y quedó en el camino, cada uno con su parte. A otros se les pegó la locura y nos acompañaron, y aún hoy lo siguen haciendo. A los que nos siguieron siempre y a los que nos mataron gratuitamente. A mi familia, a Agus (mi valkiria) y a una persona que sin darse cuenta me envició a los cinco años: mi abuelo Eduardo a quien le debo mis primeras aventuras entre toneladas de papel viejo en el parque Rivadavia.

Jorgete, te debo esta locura. Todavía veo las revistas y veo dos locos tratando de hacerse camino con los cuadritos y dos acérrimos críticos de las manos que dibuja Liefield. Jok, te debemos una gran parte de esto a vos (sos un grosso).
Y acabo de darme cuenta que no somos pibes.
Les agradezco casi infnitamente!

Anónimo dijo...

Bueno, qué les puedo decir de este camino recorrido... parece mentira. Es un lástima que Camulus aún no tenga el lugar que, creo yo, se merece. Un libro justiciero que llegue a manos de miles de lectores. Pero yo estoy seguro de que eso llegará, no sé bien en qué idioma, pero seguramente se dará. Hay que resistir, muchachos, les mando un abrazo.

jok, el celestino.